El original gato persa

Era una raza dotada de pelaje largo, fino y sedoso, en especial en la cola. En sus orígenes era de color gris uniforme, el cual adoptaba una tonalidad más oscura en la cabeza.

Aparte del color, la raza era exactamente igual que la del gato conocido como de Angora. El Angora en otros tiempos era una raza que se consideraba que únicamente que podía ser blanca. En realidad son de muchos colores pero los de color blanco gozaron de gran estima entre la nobleza francesa de varios países europeos. El persa de hoy en día guarda poco parecido con sus antecesores.gato-persa-blanco

Hablando de la longitud de su cuerpo, colores y anatomía, el cual no constituye motivo de extrañeza ya que es el resultado de muchos años de cruza en relación a los rasgos indicados. Si se pudiera retroceder en el tiempo se tendría ocasión de comprobar que se enviaban gatos de pelo largo, tanto de Persia como de Turquía, con destino a Europa donde gozaba de gran aceptación sobre todo en Francia. El hecho de que existiere una ligera diferencia tanto en el pelaje como en la estructura corporal de estas razas, por otra parte similares es algo que en buena medida pasa desapercibido.

En el transcurso de un espacio de tiempo relativamente breve, el gato persa alcanzó tal popularidad que el número de los que se criaban dio origen a diversas mutaciones, se llegan a contar hasta doscientos colores diferentes. Su carácter es mimoso y resistente pero también puede ser muy temperamental. Si crees ser apto para esta raza felina, debes de querer una raza majestuosa para tener en casa, además de disponer de tiempo para cepillarlo y peinarlo todos los días por su pelaje. Este gato rechoncho puede ser una buena oportunidad para adoptar si es que te gustan los mininos.

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