Siempre habrá que seguir algunas reglas para que tu mascota se sienta más segura y confiada contigo, en este caso para tu gato.
Mientras más las sigas será mejor tanto para ti como para el felino. Intenta ponerte en la piel peluda de tu gato para ver el mundo con sus ojos, mientras más conozcas sobre el comportamiento natural de los gatos, menos le costará conseguirlo. Para poder ser realmente justo con tu gato es necesario que comprenda y acepte su forma de ser. Casi nunca hará algo para complacerte, pero es capaz de hacer un mínimo esfuerzo por un dulce.
Una pequeña golosina es el medio ideal para conseguir que tu minino aprenda lo que esperamos de él. Pero también las caricias y los juegos son unas recompensas que aprecia mucho. Los gatos que viven dentro de la casa necesitan hacer ejercicio para mantenerse física y mentalmente en forma. Los gatos que no tienen nada que hacer suelen dirigir sus instintos de caza y actividad contra objetos que están generalmente prohibidos. Aunque a tu gato le gusta practicar algunas actividades variadas para saciar su instinto curioso, necesitan de la rutina dentro de su hogar. Lo mejor es organizar la jornada de tu gato a base de rituales y horarios fijos.
Tu gato necesitan de un grito para regañarlo solo cuando se están comportando mal, si lo castigas más tarde, no logrará establecer ninguna relación entre el castigo y la acción que ha cometido. Lo único que causarás será enojo e inseguridad. Si de repente notas un cambio de comportamiento y sin causa aparente, puede estar relacionado con la salud de tu gato. A tu felino le irritan las heridas y enfermedades dolorosas y además lo vuelven asustadizo. Lo mejor es que lo lleves al veterinario.