Distantes, independientes y, a menudo, misteriosos, los gatos no son conocidos como seres emocionales y expresivos. Esto lleva a muchas personas a preguntarse: ”¿Los gatos se ponen tristes?” o “¿Está feliz mi gato?”.
Por lo antes planteado, algunos estudios han demostrado que efectivamente los gatos sienten emociones y por supuesto las expresan con sus dueños sin muchas agitaciones y alteraciones en su comportamiento.
¿Cómo puedo saber si mis gatos está tristes?
Al igual que en los humanos, existe una diferencia entre la tristeza y la depresión en los gatos, aunque a menudo los síntomas son los mismos, pues en algunas ocasiones se repiten ciertos patrones de conductas.
Si de casualidad nota algo diferente en su gato, no se asuste de inmediato, pues es posible que tenga un mal día, que su horario haya cambiado o que haya perdido el control del día, esta conducta pueden suceder si su gato perdió algo valioso como su juguete.
Sin embargo, si nota que su gato muestra los signos mencionados durante un período prolongado y comienza a afectarlo, lo recomendable es que lo lleve a su veterinario de confianza para que este realice un chequeo general y pueda determinar lo que le molesta a su felino.
Pérdida o cambios en el apetito
Todos conocemos el canto de sirena de un gato cuya cena se retrasa 1,2 minutos. Si tu gato normalmente tiene un apetito saludable o exige comida en ciertos momentos y de la noche a la mañana notas una disminución en sus hábitos alimenticios, esto podría indicar que está triste.
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Cambios en las deposiciones
Por lo general, los gatos son fáciles de entrenar, así que si tu gato tiene accidentes en la casa, es una señal de que algo está pasando. Ya sea una llamada de atención, un problema físico o el resultado del estado emocional, de tu gato, es algo que deberás observar y determinar en función de otros factores del comportamiento de tu felino.
Ignorar a los seres queridos o las actividades favoritas
Si su gato suele estar acurrucado o loco por jugar y ahora está malhumorado y solo, es posible que se sienta triste y que necesite atención inmediata, bien sea del entorno familiar e incluso de un veterinario capacitado.
Aumento en la frecuencia o el volumen de la charla
¿Tu gato es más hablador o más ruidoso de lo habitual? ¡Escúchalos! Esto puede ser un grito de atención o una señal de que está pasando algo más y tu gato no sabe cómo procesarlo.
Así que preste mucha atención a los cambios de comportamiento de su felino, especialmente si este tipo de conducta comienza a suceder con regularidad sin ninguna razón aparente.
No arreglarse a sí mismos
La mayoría de los gatos son buenos para mantenerse limpios, pero si notas que tu gato normalmente limpio se está enredando o despeinando, este cambio de comportamiento puede ser emocional.
Así que presta mucha atención para que puedas determinar a tiempo si algo afecta a tu mascota.