La alimentación es lo más importante para que nuestros gatos tengan una vida sana y equilibrada. Una causa común para padecer una enfermedad es la mala alimentación . Por supuesto, nuestros animales en este caso los gatos, deben tener una alimentación equilibrada y de alta calidad, para que disfruten de una vida sana y que le ayude a convivir con nosotros muchos años.
El gato es un carnívoro estricto, en la naturaleza, caza pequeños animales para alimentarse. El sistema digestivo del gato, está preparado para ello, digiere de manera perfecta la carne cruda, vísceras, etc. En nuestra vida diaria no tenemos tiempo de prepararle comida elaborada, lo más parecido a lo que el comería en estado natural. Por ello se recurre al pienso o a las latas. Hay que saber que la mayoría de piensos contiene un gran porcentaje de grano, (maíz, trigo, arroz), el gato no digiere bien estos productos. No los digiere porque no los necesita para su nutrición. El pienso tiene conservantes que a la larga pueden ser nocivos para su organismo. Los piensos de gama baja y media, tienen subproductos animales que proviene de deshechos (vísceras) de otros animales.
Muchas enfermedades crónicas están ligadas a los alimentos procesados (piensos), desde gingivitis, problemas renales como las insuficiencias, cistitis, cristales en la orina, problemas intestinales, hepáticos…., estos piensos alteran las enzimas, ácidos grasos, aminoácidos, el ph bucal y un largo etc.
La dieta ideal para un gato consistiría en proporcionarle alimentos frescos y carne cruda (pollo, ternera, pavo, nunca cerdo por ser demasiado graso). Pero como dije antes no se tiene el tiempo necesario para elaborarlo, por ello debemos buscar una alternativa. Administrarle piensos de alta calidad, piensos holísticos (naturales), que no contengan conservantes, que no tengan granos entre sus ingredientes, dar de vez en cuando trocitos de carne cruda y latas de alta calidad que contengan gran proporción de carne o pescado, además las latas aportan más cantidad de agua que el pienso seco. El agua es esencial para mantener la salud del gato, al no hacer demasiado ejercicio el gato no tiene sensación de sed y bebe menos agua, y esa es una de las causas de las insuficiencias renales y los cristales en la orina. Debemos mantener el agua siempre fresca y limpia para estimular al gato a que beba.
Si se quiere proporcionar una dieta natural existen varias recetas en donde podemos balancear el alimento para proporcionar todas las vitaminas, aminoácidos, minerales que necesita nuestro gato para gozar de buena salud, aunque tendremos que añadir algún suplemento, para compensar las carencias que puedan haber, como la taurina por ejemplo, que es un aminoácido esencial para el gato. Para manipular la carne cruda debemos tener la máxima higiene, es recomendable sumergir la carne durante 15 minutos en 1 litro de agua con 15 gotas de extracto de semilla de pomelo, ya que estas gotas eliminan todas las bacterias que la carne puede contener, luego se pasa por agua para quitar el sabor acido y se congela la carne como mínimo dos días, así eliminamos todas las bacterias. El pescado siempre hay que darlo cocinado, porque contiene un parásito llamado anisakis que solo se elimina cocinando el pescado o congelándolo a muy bajas temperaturas.
Antes de cambiar el tipo de comida del gato es recomendable consultar con el veterinario.
Fuente: http://www.mainecoons.es/alimentacion/nutricion-felina/