Nuestros gatos son animales sumamente fuertes, inteligentes, audaces, misteriosos, elegantes y con un sinfín de otras cualidades. Y aunque en muchas oportunidades parezcan muy fuertes y autosuficientes, la realidad es que como todo ser vivo, también sufren enfermedades.
Las dolencias o enfermedades más comunes entre los gatos pueden ser las siguientes:
Otitis, la cual resulta de la inflamación del conducto auditivo y además de ser muy común en los perros, también se presenta en los gatos con asiduidad. La otitis puede generarles dolor, y hasta en casos extremos, la pérdida de la audición. Generalmente, la otitis se produce por la presencia de parásitos en el oído, tales son los casos de los ácaros. Una forma práctica de detectarlo es viendo que nuestro felino no tenga una secreción marrón en sus orejas cuando se las limpia. También los hongos y las bacterias pueden generar otitis en ellos. La otra forma fácil de darnos cuenta que nuestra mascota tiene otitis es porque no cesará de rascarse las orejas.
La conjuntivitis es otra de las enfermedades más típicas que podrán padecer nuestros gatos. Y esto se puede dar en cualquier edad del felino. Es la inflamación de la mucosa del ojo y es vital tratarla porque incluso, en los casos más extremos, nuestro gatito podría llegar a perder el sentido de la vista. La conjuntivitis se puede dar por infecciones oculares, por alergias o por enfermedades diversas, las mismas que afectan al sistema respiratorio, vinculadas a la suciedad en el medio ambiente. Podrás detectar si tu felino tiene conjuntivitis por el exceso de lagañas que tenga, la opacidad de la córnea y también por el lagrimeo constante.
Toca el turno de hablar de una enfermedad más compleja de tratar, como lo es la rabia. Esta enfermedad causa un virus que se transmite por medio de la saliva, mediante la mordedura de un animal infectado. Además, la rabia puede transmitirse entre distintas especies, o sea que puede pasar de animales a humanos y viceversa. La rabia, por supuesto, puede controlarse mediante una vacuna que la prevenga.
La leucemia felina es otra de las enfermedades que pueden llegar a contraer nuestros gatos. Resulta ser un tipo de cáncer qu es transmitido por el contacto con los fluidos corporales, tanto sea sangre, orina y saliva. La leucemia felina suele afectar más a los má pequeños y jóvenes, llegando a ocasionarles la muerte en muchos casos. Esta enfermedad se detecta a través de los síntomas de la falta de apetito, la anemia, la somnolencia, la debilidad y también la aparición de tumores. Pero la buena noticia es que se puede prevenir vacunándolo.
Por último, te hablaremos de la inmunodeficiencia felina, lo más parecido al SIDA en los gatos. Esta es una enfermedad que puede llegar a ser letal y esto se debe al lentivirus. Suele afectar a los gatos adultos que no están esterilizados. Y los síntomas que se detectan con esta enfermedad son las infecciones bucales, infecciones intestinales, pérdida de mucho peso y masa muscular, patologías respiratorias, enfermedades fúngicas, entre otros más. Esta inmunodeficiencia felina se transmite a través de la mordedura de un animal infectado y lamentablemente no tiene ni tratamiento ni vacunación.
