Los gatos son animales domésticos que a pesar de los cuidados que les otorgan las personas con las que viven, tienden a contagiarse ocasionalmente de ácaros, que les provocan infestaciones en los oídos cuyas complicaciones derivan en las otitis felinas.
Las otitis del gato son producidas en el 90 por ciento de los casos por los parásitos Otodectes cynoti del orden Acarina, que afectan a los mininos cachorros y adolescentes manifestándose en ambos sexos por igual, se ha observado una marcada predisposición en las razas de pelo largo y el mayor contagio se da en los criaderos debido a la cercanía entre los animalitos.
Daños del oido
La otitis es una enfermedad inflamatoria del conducto auditivo entre el pabellón auricular y el tímpano suele presentarse cuando el sistema inmunológico del gato está deprimido. Las principales características de la otitis son la inflamación del oido produciendo una coloración roja, cera color marrón-negruzca en los oídos y el gato puede perder la audición. En ocasiones el gatito sacude la cabeza insistentemente, rascándose y frotándose las orejas, además tiende a ladear la cabeza hacia el oido dañado.
El tratamiento esta destinado a atacar tres puntos
- Eliminar los ácaros del oido del gato infestado.
- Controlar la infestación secundaria y los agentes que mantienen la otitis en el gato.
- Evitar que se disemine la otitis entre otros gatos y se reinfeste nuevamente el gato.
Existen diversos mecanismos para eliminar los ácaros del gatito, lo primero es limpiar los oídos para ello el médico veterinario es la persona capacitada para hacerlo. La aplicación del antipulgas evita el contagio posterior a la eliminación de los ácaros, es común que el contagio con estos parásitos ocasione la pérdida de la capacidad auditiva del gato por lo tanto, es necesario tener paciencia y observar cual es el oido a través del cual el gatito escucha bien.
