Uno de los males que asola a algunos gatos y no deja que tengan una vida normal es la obesidad. Los gatos con obesidad, no solo no son felices, sino que además se vuelven ariscos y muy tristes y con el tiempo, comienzan a desarrollar muchas enfermedades, tales como problemas respiratorios.
Los gatos engordan por malos cuidados de sus dueños. En la naturaleza, un gato no cuenta con la suficiente capacidad para acceder a comida cada vez que quiera, por lo que debe buscar la comida por todo lados sin descanso, esto hace que muchas veces no llegan a tener a su disposición toda la comida que quieren y además, mientras la van cazando van haciendo deporte. Sin embargo, cuando tenemos un gato en casa, el gato tienen acceso a un montón de comida cada vez que quiere y el hecho de no tener que cazarla, hacer que no queme calorías.
Cómo conseguir que un gato adelgace
Darle comida humana a un gato nunca le va a causar un beneficios, sino al contrario. Este tipo de comida no está pensada para ellos y si muchas cosas nos engordan a nosotros, imaginemos por un segundo como le van a sentar a ellos.
Si ya le estás dando de la comida que tu comes, debes quitársela lentamente, sobre todo si lo que le estás dando son latas de atún o sardinas, que son extremadamente saladas para ellos.
Compra pienso seco para ellos en clínicas veterinarias, los de supermercado solamente cumplen con el propósito de que el gato no se muera de hambre, pero no es capaz de llegar a alimentarlo correctamente.
Otra forma de conseguir que los gatos adelgacen es por medio de la dosificación de los platos de comida. Déjale agua todo el día a su disposición, pero no le dejes la comida para que coma cada vez que quiera. La cantidad de comida depende de cada gato y del ejercicio que hagan, consulta a tu veterinario para saber cuál es la cantidad de comida que debes darle con base en el tipo de vida que lleve tu mascota.
